Juan cogió la escopeta y se lanzó a la caza. A los pocos minutos vio un conejo saltando por los matorrales. Cargo su arma y apuntó apretando el gatillo.
-¡Pum!
Desde la escopeta se escucho una voz al mismo tiempo que la bala caía al suelo.
El cazador la recogió y se quedó extrañado al escuchar una vez dentro de la escopeta.
En eses mismo momento, la liebre volvió a pasar con un ramo de flores y un velo de novia.
"la liebre también se iba a casar".
El cazador decidió entonces cazar un faisán en lugar de la liebre.
Juan vió a lo lejos un faisán e hizo por dos veces:
-Pam, pam.
Pero los cartuchos cayeron al suelo asustando a las hormigas que por allí pasaban.
Juan empezó a enfadarse con la situación, sobre todo si llegaba a su casa sin nada en la bolsa.
Entonces llegó el momento de un pájaro que observó posado en la rama de un árbol.
Juan cargó la escopeta y apuntando rápidamente intentó hacerse con él, pero el resultado fue el mismo.
La bala cayo al suelo a poco más de un palmo de distancia de Juan.
Cuando el joven llegó a su casa, su madre pregunto por la caza que había conseguido, a lo que Juan respondió.
Mama, he conseguido tres rabietas, ¿las puedes cocinar con patatas?
ps a ver eso lo mochan mucho por que el que me leyeron era mas distinto
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